Las SGR contribuyeron al mantenimiento de 867.200 empleos
MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
La Confederación Española de Sociedades de Garantía Reciproca (SGR-Cesgar) inyectó en 2.730 millones de euros en 2020 a pymes y autónomos afectados por el impacto económico de la Covid-19, según ha informado la institución en su asamblea general.
En concreto, las 18 SGR han beneficiado a 31.500 pymes y autónomos afectados por la crisis del coronavirus, contribuyendo al mantenimiento de cerca de 275.300 puestos de trabajo. “Los avales concedidos por las SGR durante la pandemia han supuesto un balón de oxígeno para todos los colectivos”, ha subrayado el presidente del SGR-Cesgar, Antonio Couceiro. En total, la financiación facilitada por las SGR ha contribuido al mantenimiento de 867.200 puestos de trabajo, beneficiando a más de 156.948 pymes.
Además, Couceiro ha destacado el papel que ha tenido la Compañía Española de Reafianzamiento (CERSA) en la concesión de los avales, ya que en 2020 asumió un riesgo por reafianzamiento de 1.873 millones de euros, lo que supuso casi triplicar su actividad con respecto a 2019. “Esta institución es un pilar básico del sistema y con ella hemos trabajado en estrecha colaboración y coordinación, para adaptarnos a la situación tan extraordinaria que ha supuesto la crisis de la Covid-19”, ha aclarado.
AQUISGRÁN, OTRO PRODUCTO PARA APOYAR A LAS EMPRESAS
Por otra parte, Couceiro también ha señalado la labor fundamental que jugarán las SGR durante la recuperación de la economía española. En este sentido, se ha referido al reciente lanzamiento de Aquisgrán, un nuevo producto propio de las SGR -con financiación del Instituto de Crédito Oficial (ICO), el Fondo Europeo de Inversiones (FEI) y el Banco Caminos- que ofrecerá financiación complementaria a las pymes.
“Hemos trabajado intensamente, durante cuatro años, para conseguir lanzar este nuevo producto que permitirá a las pymes españolas acceder a los mercados de capitales, ampliando y diversificando sus fuentes de financiación”, ha señalado Couceiro.
Por último, ha destacado la adhesión, por parte de las SGR, al Código de Buenas Prácticas voluntario, aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 11 de mayo, que tiene como objetivo apoyar la solvencia de empresas y autónomos que recibieron financiación avalada, facilitando la renegociación de su deuda.