BRUSELAS, 22 (EUROPA PRESS)
La Comisión Europea revisará la adquisición del fabricante israelí de semiconductores Autotalks por parte de la multinacional estadounidense Qualcomm tras las solicitudes de España y otros 14 Estados miembro de reevaluar la propuesta de fusión al considerar que puede afectar a la competencia en sus territorios ya que elimina a un competidor relevante en un mercado concentrado.
La adquisición propuesta no alcanza los umbrales de notificación establecidos en el reglamento de concentraciones de la UE, y no podía notificarse en ningún Estado miembro, pero Bélgica, Francia, Italia, Países Bajos, Polonia, España y Suecia presentaron solicitudes iniciales de remisión en base a una disposición de la norma que les permite solicitar a la Comisión que examine una concentración que no tenga dimensión comunitaria pero afecte al comercio dentro del mercado único y amenace con afectar significativamente a la competencia en el territorio de los países que presentan la solicitud.
Otros países del Espacio Económico Europeo tuvieron la oportunidad de sumarse a las solicitudes de remisión originales y, posteriormente, Chequia, Dinamarca, Finlandia, Irlanda, Luxemburgo, Portugal, Rumanía y Eslovaquia se sumaron a las solicitudes iniciales. Esta es la segunda ocasión en que la Comisión acepta solicitudes de remisión
Sobre la base de la información de que dispone la Comisión en esta fase inicial, y sin perjuicio del resultado de su investigación completa, Bruselas considera que la transacción cumple los criterios de remisión de conformidad con el reglamento.
El Ejecutivo comunitario ha pedido a Qualcomm que notifique la transacción, la cual no puede llevar a cabo sin la autorización de la Comisión, una fusión que puede combinar a dos de los principales proveedores de semiconductores V2X, una tecnología clave para mejorar la seguridad vial, la gestión del tráfico y reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2), así como para el despliegue de vehículos autónomos.
En este sentido, Bruselas considera importante garantizar que clientes como los fabricantes de equipos originales o los gestores de infraestructuras mantengan el acceso a la tecnología V2X a precios y condiciones competitivos.