MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha decretado la subida de los impuestos a las instituciones financieras, la compra de vehículos y la industria química para compensar la eliminación de los tributos sobre el diésel y el gas para uso residencial.
En un comunicado remitido por el Palacio de Planalto, el presidente ha emitido una medida provisional para la subida de las diferentes tasas, mientras que las medidas referentes al diésel y al gas han sido publicadas en el Diario Oficial de la Unión y han entrado en vigor de inmediato.
En relación al gas de cocina, la medida es permanente y se aplica al producto destinado al uso doméstico y envasado en envases de hasta 13 kilos. Por su parte, la reducción del impuesto al gasóleo será válida durante los meses de marzo y abril.
La secretaría general de la presidencia ha explicado que estas dos medidas sobre los combustibles “buscan mitigar los efectos de la volatilidad de los precios y las fluctuaciones en el tipo de cambio y los precios del petróleo en el mercado internacional”.
Según el Gobierno, la disminución de los impuestos sobre los combustibles este año supondrá una reducción de la carga fiscal de 3.670 millones de reales brasileños (535,5 millones de euros). Para 2022 y 2023, la reducción del impacto tributario será de 922 y 945 millones de reales (134,5 y 137,8 millones de euros), respectivamente.
El jueves pasado Bolsonaro anunció la eliminación de los impuestos sobre el diésel y el gas para compensar las subidas de precios programadas por Petrobras, la petrolera estatal del país. Tras estas críticas, el mandatario anunció la destitución del presidente de la compañía, Roberto Castello, para poner al militar Joaquim Silva e Luna al frente de la empresa.