MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
El consejero delegado de Endesa, José Bogas, ha considerado que la idea del Gobierno de poner en marcha las subastas de energía inframarginal, por las que las grandes eléctricas deberían acudir de manera obligatoria a subastar parte de su electricidad producida por nucleares, hidroeléctricas y eólica, “no sería acertada”, ya que supondría “perjudicar a unos consumidores para beneficiar a otros”.
En un encuentro con la prensa, Bogas señaló que esta medida, que ya estaba recogida en el Real Decreto 17/2021, a través del que se articuló el plan de choque para contener el precio de la luz y que incluía un mandato expreso para que el Gobierno celebrara la primera de estas subastas antes del pasado 31 de diciembre, “no es la vía para que haya una mayor competitividad y una mayor liquidez”.
A este respecto, aseguró que estas subastas “ni bajarían el precio de los clientes ni darían más profundidad a lo que es los mercados a largo plazo”, ya que las grandes eléctricas venden la energía que generan a largo plazo con “unos precios más que razonables y muy por debajo de los precios mayoristas”.
En este sentido, indicó que Endesa cerró la venta de su energía el año pasado a un precio de 50 euros por megavatio hora (MWh), precio que se sitúa en los 54 euros/MWh para 2022 y en los 58 euros/MWh para 2023.
“Si esa energía la tenemos vendido a clientes a ese precio, hacer una subasta implicaría que transmitiéramos esa generación a otras comercializadoras y nuestros clientes se quedarían sin ese beneficio, ya que el 97% generación ya la tenemos vendida y nos obligaría a modificar los contratos”, dijo.
LA SOLUCIÓN, EN EL RECORE.
Por ello, insistió en que la solución puede estar en adelantar el ajuste de la rentabilidad de las plantas del régimen especial o Recore (renovables, cogeneración y biomasa) que reciben retribución especifica. “Lo del Recore es lo que tiene sentido, que no perjudica a nadie”, añadió.
Respecto a los retrasos existentes en la facturación, tanto a clientes como a comercializadoras, desde la entrada en junio del año pasado del nuevo sistema de periodos horarios y los distintos cambios en los peajes y cargos, señaló que prevé que esté subsanado “antes del final del primer trimestre”, aunque indicó ya se ha reducido mucho el número de clientes afectados de la compañía, siendo de “poco más del 1%”.
En lo que se refiere a la última sentencia del Tribunal Supremo, que anula, por tercera vez, el sistema de financiación del bono social eléctrico por considerarlo discriminatorio respecto a unas empresas del sector frente a otras, Bogas estimó que el desembolsó a devolver a Endesa podría ascender a unos más de 300 millones de euros.
Por otra parte, afirmó que será necesario elevar el límite de inversiones en redes para cumplir con los objetivos que marca el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC).