MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
Asaja ha advertido de que los agricultores no pueden asumir más incrementos en costes laborales tras conocer el mecanismo de cotización propuesto por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones que entrará en vigor en 2023, ya que no tiene en cuenta las características fiscales específicas del sector, según ha informado en un comunicado.
En concreto, la organización agraria ha señalado que supone un incremento en los costes sociales para los autónomos agrarios de cerca del 40%.
Según Asaja, la última propuesta para reformar el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) del Gobierno busca que el sector agrario pague cotizaciones sociales en función de sus ingresos reales mediante un sistema de tramos, que se definen teniendo en cuenta los rendimientos netos del autónomo.
El Ministerio de Seguridad Social ha llevado a la mesa de diálogo social un sistema de 13 tramos distintos de rendimientos netos (ingresos deduciendo gastos). Con esta propuesta los agricultores pueden cambiar de tramo hasta seis veces en un año y la cuota que pagarán a la Seguridad Social se calculará sobre esa base.
Los autónomos que tienen ingresos bajos y están clasificados en cualquiera de los primeros dos tramos (menos de 600 euros o de 600 a 900 euros) experimentarán un ahorro una vez se implemente completamente la propuesta; los del tercer tramo, de 900 euros a 1.125,9 euros, no notarán la diferencia, mientras que los que se encuadren en cualquiera de los diez tramos restantes, la inmensa mayoría de los cotizantes agrarios, tendrán que pagar más a la Seguridad Social con incrementos en las cuotas que llegarían en algunos casos a pagar el triple de lo que se cotiza en la actualidad, según ha explicado la organización agraria.
Por otra parte, Asaja considera que el mecanismo de cotización planteado por el Ministerio de Seguridad Social no tiene en cuenta las características fiscales específicas del sector agrario.
La organización señala que es un método basado en los rendimientos netos, por lo que consideran que los autónomos agrarios pagarán más o menos en función de su capacidad de deducción de gastos, no de sus ingresos reales.
“Una nueva vuelta de tuerca para un sector asfixiado ya por los incrementos de costes de producción, la imposibilidad de repercutir los mismos en el precio de venta de los productos y por las limitaciones productivas que imponen la nueva PAC, con mayores condicionamientos medioambientales. Mientras tanto, el Gobierno, lejos de aportar soluciones, con cada nueva decisión exprime aún más las maltrechas economías agrarias”, han indicado.