Insta al Estado a adquirir presencia en las empresas de sectores estratégicos y critica la subida a la matriculación de los coches diésel
MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha pedido este jueves a la CEOE que sea “leal” y cumpla con el compromiso que adquirió en el acuerdo interconfederal de negociación colectiva de impulsar la subida del salario mínimo de convenio a 1.000 euros mensuales.
Durante su intervención en el Congreso de UGT-FICA, en el que ha sido reelegido Pedro Hojas como secretario general de esta federación, Álvarez ha aplaudido el “discurso teórico” que ayer, en este mismo foro, pronunció el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, pero ha avisado de que está “harto de los discursos teóricos” y de que se deben hacer cosas para acabar con los problemas del país.
“Está bien venir aquí a hablar de lealtad. Pero me gustaría que la CEOE fuera leal con la UGT y subiera los sueldos mínimos de convenio a 1.000 euros como acordó”, ha subrayado.
El líder de UGT también se ha referido a la reforma laboral y a la actitud de la CEOE a la hora de afrontar los cambios. Según ha advertido, la reforma laboral “no se va a derogar” sin la movilización de los sindicatos, por lo que ha instado a combinar negociación y movilización para “llegar al máximo posible” de las reivindicaciones sindicales.
El sindicato quiere retomar las negociaciones para la derogación de las reformas laborales en el punto donde se dejaron en febrero de 2020, antes del estallido de la pandemia. En opinión de Álvarez, o hay derogación previa de las reformas o será “dificilísimo” llegar a acuerdos con la CEOE porque “no tiene interés en entrar en negociar” si se supedita la derogación a un acuerdo con los empresarios.
El dirigente sindical ha afirmado que UGT va a tener que seguir luchando por sus objetivos y que nadie “le va a regalar nada”, aunque ha reconocido que con un Gobierno de izquierdas será “mucho más fácil” conseguirlos.
Sin embargo, ha añadido, “eso no tiene que privar” a la UGT de poner sobre la mesa sus demandas y si, es necesario, recurrir a las movilización. “El Gobierno tiene muchas presiones (…) Es importante que se nos vea en la calle, que no crea el Gobierno que es contra el Gobierno, es porque queremos que salgan adelante nuestras demandas”, ha explicado el líder de UGT.
EL ESTADO DEBE ESTAR EN EMPRESAS DE SECTORES ESTRATÉGICOS
Una de esas demandas es la modificación de los requisitos para acceder al Ingreso Mínimo Vital (IMV) a fin de permitir que los “cientos de miles de familias” que ahora mismo no tienen nada tengan que dejar de hacer cola para conseguir bolsas de alimentos, ha indicado.
Así, Álvarez ha reclamado al Gobierno que el IMV se conceda a partir de una declaración responsable de sus posibles beneficiarios para que pueda ser un medio que acabe “con esas colas de la vergüenza”. “Eso nos ayudaría a avanzar en el sendero de no dejar a nadie atrás”, ha añadido.
En cuanto a los fondos europeos, el líder de UGT considera que son una “gran ocasión” para dar el salto que necesita España en su modelo productivo y apostar por el sueño de UGT: un pacto de Estado para la industria que congregue a todas las fuerzas políticas y que vaya más allá de una legislatura.
Álvarez ha afirmado además que, para UGT, es una condición necesaria que los proyectos de las empresas para hacerse con los fondos europeos cuenten con la participación de los sindicatos tanto en las empresas como en el ámbito sectorial y ha reclamado que esta petición, a la que el Gobierno ha dicho que le ha dado el visto bueno, se plasme en una norma.
Además, ha instado al Estado a aprovechar este proceso en no quedarse sólo en darles subvenciones a las empresas, sino también en adquirir presencia en los consejos de administración de sociedades que operen en sectores considerados estratégicos.
“No hay por qué regalar a las empresas estos recursos. Éstas deberían convenir con el Gobierno en que, en determinados sectores, es necesaria la presencia del Gobierno en los consejos de administración”, ha apuntado Álvarez, que ha añadido que esto ya lo están haciendo Alemania y Francia.
El líder de UGT ha aprovechado también para lanzarle otro mensaje al Gobierno y a su vicepresidenta cuarta, Teresa Ribera: “Está muy bien dar el salto al coche eléctrico, pero subir el precio este año a la matriculación de los coches diésel va contra el medioambiente, contra el empleo y contra la recaudación de impuestos” en España, ha advertido.