MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
El presidente argentino, Alberto Fernández, ha insistido en que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) no se ha cerrado porque el país “no va a arrodillarse para pagar una deuda”.
En un evento público en la ciudad de Morón, el mandatario ha prometido que buscará un acuerdo “que no condicione el futuro de los argentinos”: “no vamos a hacer un acuerdo que deje más postergados a los argentinos (…) voy a cerrar el acuerdo con el fondo el día que sepa que eso no condiciona el futuro de los argentinos”, ha añadido.
En un informe reciente, Bank of America ha proyectado que Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI) alcanzarán un acuerdo sobre la reestructuración de deuda entre diciembre de este año y enero de 2022.
El análisis de la entidad financiera ha destacado que el Gobierno argentino ha enviado señales de que el acuerdo para reestructurar 45.000 millones de dólares (38.640 millones de euros) es una prioridad. Sin embargo, los inversores esperan una mayor claridad una vez pasadas las elecciones legislativas de noviembre.
La previsión de Bank of America se basa en los “masivos” vencimientos de deuda del FMI y las consecuencias “muy negativas” en el tipo de cambio entre divisas y la inflación por posibles retrasos en los pagos. En concreto, el banco cifra en 20.000 millones de dólares (17.168 millones de euros) los vencimientos que Argentina deberá afrontar a finales de año con el FMI, una situación que hace del acuerdo entre sendas partes un asunto “urgente”.
En un acto de conmemoración de la muerte del expresidente Néstor Kirchner, Fernández ha reivindicado las políticas del exmandatario y ha hecho hincapié en que para su gestión no hay “nada más importante que sacar del pozo de la pobreza a los argentinos que han caído ahí”.
“No pensamos en un país para pocos, sino para todos; no tenemos esa idea que dice que en Argentina sobran 20 millones de habitantes”, ha recalcado, según informaciones de la agencia de noticias ‘Telam’.
Tras definir a Kirchner como una “guía” y remarcar el honor que significó para él “haberlo acompañado como jefe de Gabinete de su Gobierno”, Fernández ha señalado que su figura es “clave” para la historia argentina.
En este sentido, ha expresado que la situación en el país es “similar” a la de 2003, cuando la pobreza había aumentado “con las políticas neoliberales que el Gobierno de la Alianza había llevado adelante”. “Todos sabemos quién juega para la gente y el pueblo y quién para otros intereses”, ha dicho.