MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
COAG y UPA han pedido al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación la incorporación de una medida de inversiones en explotaciones vitícolas dentro de la Intervención Sectorial del Vino (ISV), la futura denominación del Programa de Apoyo al sector vitivinícola (PASVE), en el plan estratégico de la nueva PAC.
Según las organizaciones agrarias, el reto es hacerlas “más resilientes, modernas, eficientes y sostenibles”.
“Los viñedos españoles deben modernizarse para estar preparados para los retos de futuro que afronta el sector. Retos como el cambio climático, la globalización de los mercados, o la adaptación a las estrategias del Pacto Verde europeo, como la estrategia ‘De la Granja a la Mesa’ o la de biodiversidad, requieren de una acción decidida en el caso del sector vitícola”, han señalado.
Los viticultores han reclamado un nuevo plan de inversiones destinadas a una mejora tecnológica, de gestión y de innovación, tales como la viticultura de precisión, la teledetección, distintos tipos de sensores, estaciones meteorológicas, aplicaciones digitales y demás infraestructura necesaria para la gestión integrada de plagas y la fertilización inteligente.
También las mejoras en gestión del agua, la implantación de energías renovables, la instalación de mallas antigranizo o equipos antiheladas, o la introducción de medidas de prevención de daños de fauna silvestres.
“Estas inversiones en explotaciones vitícolas, aparte de ser necesarias, deben ayudar al sector, y en especial a los viticultores, a mejorar la gestión de sus viñedos, y pueden ser una gran oportunidad para mejorar su viabilidad y competitividad”, han recalcado desde COAG y UPA.
Ambas organizaciones han demandado que no se recorte el presupuesto destinado para reconversión y reestructuración del viñedo y que en el ajuste del presupuesto de la ISV se mantenga un reparto proporcional entre todas las medidas, tomando como referencia las actuales asignaciones del PASVE.