Los PGE de 2022 incluyen una partida de más de 1.700 millones de euros para el desarrollo de esta infraestructura
MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
El Gobierno ha confirmado que el Corredor Mediterráneo, al menos en su tramo desde Almería hasta la frontera francesa, entrará en operación a partir de 2025 o, como muy tarde, a partir de 2026.
Así lo ha anunciado la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, durante su participación en un acto que ha congregado en Madrid a más de 1.300 empresarios de todo el país para denunciar los continuos retrasos en esta infraestructura.
“Estoy apretando en todos los departamentos del Ministerio, ya que no nos podemos permitir más retrasos. Desde luego, estamos ante un momento histórico, con la oportunidad de abordar una verdadera transformación en este país, todavía con muchos retos por delante”, ha señalado la ministra.
“Estamos en disposición de afirmar que en 2025 o 2026 estará ejecutada la conexión entre Almería y la frontera francesa”, ha avanzado. En cualquier caso, ha añadido que no sabe si será la ministra que acabe al fin con las obras del Corredor, pero ha defendido que sí pertenece a un Gobierno que está poniendo “todo el empeño” en que eso sea así.
En este sentido, ha trasladado que es necesario recordar cuándo se puso el foco en esta infraestructura, que no fue hasta hace diez años, cuando el exministro José Blanco la incluyó en la Red Transeuropea de Transporte, un hito que definió el trazado y las principales características del corredor.
INVERSIÓN PREVISTA
Según Sánchez, el mayor esfuerzo se ha realizado en los últimos tres años, cuando el Ministerio lo pilotaba José Luis Ábalos, durante los cuales se cuadruplicó el nivel inversor destinado a esta infraestructura respecto al anterior Gobierno. En concreto, se han licitado 3.000 millones de euros, adjudicado 2.000 millones y ejecutado 1.000 millones en estos últimos tres años.
Asimismo, de cara al futuro, de los 16.000 millones de euros que su Ministerio concentrará el año que viene, según los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2022, más de 1.700 millones estarán destinados al Corredor Mediterráneo.
“El ferrocarril debe convertirse en el gran modo de transporte, ya que mejora las condiciones de vida de los ciudadanos, la competitividad, la descarbonización de la economía, al mismo tiempo que se avanza con los compromisos con Europa. Hay que hacer un esfuerzo muy importante para que las mercancías utilicen el ferrocarril como medio preferente de transporte”, ha concluido.
REPRESENTACIÓN EMPRESARIAL
El acto al que ha acudido la ministra responde a la iniciativa ‘#QuieroCorredor’, impulsada por la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), que aglutina a 160 empresarios de la región, entre los que se encuentran el presidente de Mercadona, Juan Roig, o el presidente de Boluda Corporación Marítima, Vicente Boluda.
El presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet, también presente en el acto, ha indicado que se trata de una “necesidad absoluta” que se cumplan los plazos del Corredor Mediterráneo, porque está “más que demostrado” lo que suponen las infraestructuras para vertebrar territorios y para mejorar el empleo y el crecimiento de los ciudadanos. “Lo que está ocurriendo con el Corredor no se comprende, porque más de la mitad de la potencia económica de España está en los alrededores del Corredor y, por tanto, hay que echar el resto”, reiteró.
Por su parte, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha destacado que el Corredor Mediterráneo es una infraestructura “fundamental” tanto para las empresas como para los ciudadanos, porque aporta “cohesión” al país, al extenderse desde Gerona a Cádiz y, por ello, afirmó que “clarísimamente” debe estar presente en los objetivos españoles, especialmente ahora con los fondos europeos, para mejorar la competitividad de España.
Garamendi defendió también el resto de infraestructuras pendientes del país, como los corredores atlántico y cantábrico, o el tren a Extremadura, que son “clave” para “capilarizar” España con unas infraestructuras “potentes”. “Cada vez que una infraestructura no se realiza, España pierde competitividad”, indicó el jefe de la patronal, que lamentó que Cataluña rechazara la inversión en el aeropuerto de El Prat.
Entre los asistentes del mundo empresarial estaban Eduardo Baamonde, presidente de Cajamar; Carlos Barrasa, presidente de BP España; Héctor Colonques, presidente de Porcelanosa; José García Carrión, presidente de J. García Carrión; Agustín Gregori, CEO de Grefusa; Julia López, vicepresidenta de American Express; Pedro López, presidente de Chocolates Valor; Íñigo Sagardoy, presidente de Sagardoy Abogados; José TArradellas, presidente de Casa Tarradellas; y Adolfo Utor, presidente de Baleària, entre muchos otros.