BRUSELAS, 27 (EUROPA PRESS)
La Comisión Europea ha anunciado este miércoles el inicio de una investigación en profundidad sobre la compra de la británica ARM por el fabricante de chips estadounidense Nvidia para aclarar si la operación puede dañar la competencia en el espacio económico europeo porque quede restringido el acceso a la tecnología de la primera por parte de otros competidores.
“Nuestro análisis muestra que la compra podría implicar una restricción o degradación del acceso a la propiedad intelectual de ARM, lo que distorsionaría muchos mercados en donde los semiconductores son utilizados”, ha resumido la vicepresidenta de la Comisión Europea responsable de Competencia, Margrethe Vestager.
Por eso, el Ejecutivo comunitario quiere investigar en detalle si a pesar de la operación las empresas con actividad en la UE podrán seguir teniendo acceso efectivo a las tecnologías necesarias sin que ello perjudique su capacidad de desarrollo y manteniéndose precios competitivos.
Nvidia es uno de los principales fabricantes de tarjetas de vídeo y chips gráficos, mientras que ARM se especializa sobre todo en la fabricación de procesadores y otros circuitos integrados.
Bruselas teme que el poder de que disfruta ARM sobre el mercado de la concesión de licencias de patentes de unidades centrales de tratamiento (CPU) que se utilizan en los procesadores se traduzca en una restricción del acceso a las patentes por competidores cuando se concluya la compra.
También le preocupa que la operación favorezca los incentivos económicos para fijar estrategias con las que reducir la competencia en el sector del suministro de procesadores en diversas áreas de aplicación.
Así, quiere examinar si la transacción podría frenar la innovación porque los competidores no quieran compartir información comercial sensible con la empresa resultante al ser competidores de Nvidia o que se reconduzca inversión de I+D prevista por ARM a productos más rentables para Nvidia.