La tasa de inflación de la zona euro se situó el pasado mes de septiembre en el 3,4%, frente al 3% registrado en agosto, lo que supone el mayor incremento de precios en la región desde septiembre de 2008, según la estimación adelantada del dato publicada este viernes por Eurostat, la oficina comunitaria de estadística.
Así mismo, el avance del índice de precios de consumo (IPC) de septiembre, en un 4% y con un aumento de siete décimas con respecto al dato de agosto.
El repunte de la inflación en el noveno mes del año responde al incremento del 17,4% de los precios de la energía, dos puntos porcentuales por encima del alza de agosto. Asimismo, los alimentos, el alcohol y el tabaco registraron un encarecimiento del 2,1%.
A su vez, los bienes industriales no energéticos experimentaron un descenso en su nivel de precios de una décima, hasta el 2,1%, mientras que la inflación de los servicios alcanzó el 1,7%, seis décimas más.
De este modo, al excluir el impacto de la energía, la tasa de inflación registrada en septiembre subió al 1,9%, dos décimas más que en agosto. Si se excluye también el efecto de la comida, el alcohol y el tabaco, la tasa se situó también en el 1,9%, lo que supone tres décimas más que el mes precedente.
Entre los países de la zona euro, la mayor subida de precios en septiembre se ha registrado en Estonia, con un 6,4%, seguida de Lituania, con un 6,3%, y Eslovaquia, con un 5,1%. Por otro lado, los menores encarecimientos de precios se dieron en Malta (0,7%), Portugal (1,3%), Grecia y Finlandia (2,1% en ambos casos).
En el caso de España, la tasa de inflación interanual armonizada se ha elevado en septiembre hasta el 4%, desde el 3,3% de agosto, lo que ha ampliado a seis décimas el diferencial de precios con la eurozona.