Ve de “indispensable” regular el alquiler y marca a su socio el camino del SMI: “Lo que empieza como imposible acaba siendo factible”
MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
Podemos ha advertido al PSOE que a día de hoy no dispone de sus votos, ni tampoco los de sus socios parlamentarios, para aprobar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022 y ha proclamado que la vía “ineludible” para el acuerdo pasa por desplegar la reforma fiscal y la nueva ley de vivienda, con regulación del alquiler.
Los portavoces estatales de la formación morada, Isa Serra y Pablo Fernández respectivamente, han explicado en rueda de prensa que las cuentas públicas deben articular ya un tipo mínimo del 15% en el impuesto de Sociedades para grandes empresas, además de acometer ya este año la derogación de la reforma laboral.
De hecho, Fernández ha expresado que la subida del salario mínimo interprofesional (SMI), que se aprobará este martes en Consejo de Ministros como ha anunciado el presidente Pedro Sánchez tras reiteradas demandas de Unidas Podemos, revela el camino a seguir para el ala socialista del Ejecutivo.
“LO IMPOSIBLE ACABA SIENDO FACTIBLE”
“Demuestra que para el PSOE lo que empieza siendo imposible, acaba siendo factible”, ha reivindicado el dirigente de la formación morada, para reivindicar que su apoyo es “condición de posibilidad” para fraguar un amplio acuerdo parlamentario sobre las futuras cuentas públicas.
Y es que Fernández ha desgranado que la regulación del alquiler y el avance en la fiscalidad progresiva son dos puntos recogidos en el acuerdo de gobierno, que deben ejecutarse dado que además son dos campos que generan consenso, tanto en las fuerzas parlamentarias que dan soporte al Ejecutivo como a nivel internacional.
En este sentido, ha reiterado que un tipo mínimo del 15% para lograr una fiscalidad “progresiva” y justa” es algo asumido por el G-20, la OCDE y el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien acelera su puesta en marcha.
“Sería inconcebible que un Gobierno progresista no incorpore ya este tipo mínimo del 15%”, ha apostillado Fernández para calificar de “inaceptable” que las Pymes paguen proporcionalmente más impuestos que las grandes empresas.