El informe de riqueza global de 2021 elaborado por Credit Suisse pronostica que las acciones de riqueza del mundo, que incluye tanto los activos financieros como los no financieros, crecerán un 39% durante los próximos cinco años, alcanzando los 490 mil millones de euros en 2025, según ha publicado Financial Times. Se prevé que el número de millonarios crecerá aún más rápido, y lo hará en un 50%, pasando de 56,1 millones a finales del 2020 a 84 millones. Y el número de “súper millonarios”, es decir, individuos con un patrimonio neto por encima de los 50 millones a su nombre, aumentará un 60% hasta los 344.000.
Unas predicciones que se basan en la suposición generalizada, compartida por el FMI, de que la economía mundial está preparada para una sólida recuperación posterior a la pandemia, con un aumento del PIB del 6% solo este año. Por lo tanto, incluso si los mercados financieros no brindan un impulso adicional a la riqueza, es razonable esperar que el crecimiento económico lo haga.
Si bien Estados Unidos seguirá siendo el país más rico en términos de riqueza familiar, los mayores aumentos provendrán de China e India, donde la gente está acumulando riqueza a tasas sin precedentes. Para 2025, la riqueza de los hogares de China será igual a la de los EE. UU. En 2017, según apunta el informe elaborado por Credit Suisse.
Una acumulación de fortuna que coincide con la persistente desigualdad de la riqueza. Los ricos no se hicieron más ricos por ser más inteligentes en promedio que los demás; se volvieron más ricos, principalmente, porque los precios de los activos se vieron impulsados por las políticas antipandémicas de los gobiernos y los bancos centrales, principalmente las tasas de interés ultra bajas. “Si se dejan de lado los aumentos de los precios de los activos, es posible que la riqueza de los hogares a nivel mundial haya disminuido”, señalan los bancos.
Por el contrario, las personas más pobres sufrieron la peor parte del daño económico de la pandemia, perdieron sus trabajos, vieron recortes salariales y, a menudo, se vieron obligadas a agotar sus escasos ahorros. Si ponemos la mirada en España la cifra de contratos terminados en este mes de agosto es mayor a la de la caída del número de cotizantes. En concreto, la cantidad de contratos terminados alcanzó el martes 31 de agosto los 342.276.