MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
Castellana Properties cerró su ejercicio fiscal, finalizado el pasado 31 de marzo, con unas pérdidas netas atribuidas de 31,85 millones de euros, en comparación con los ‘números negros’ de 17,16 millones de euros contabilizados un año antes, según datos publicados este martes por parte de la firma.
A cierre del año fiscal, la socimi propietaria de centros comerciales y oficinas logró un resultado de explotación antes de la valoración de sus inversiones inmobiliarias de 26,47 millones de euros, un 50% menos en comparación con el año previo.
Además, la firma se anotó un resultado de explotación negativo de 18,99 millones de euros, frente a las ganancias de 29,63 millones de euros del ejercicio fiscal previo, con un resultado financiero negativo de 12,86 millones, un 3,1% más.
El beneficio bruto de explotación (Ebitda) anual fue de 26,5 millones de euros, un 39% menos. Además, la firma resaltó que, con motivo de la pandemia, ha pactado bonificaciones temporales con sus inquilinos por valor de 19 millones de euros, “impactando directamente en los beneficios”, aunque esta decisión le permitió mantener el ratio de ocupación en niveles cercanos a la plena ocupación y con contratos con una duración de 13,4 años y un ratio de cobro de más del 95%.
VALORACIÓN DE ACTIVOS
Al término del pasado ejercicio fiscal, la socimi contaba con una cartera de activos valorada en 987,16 millones de euros, lo que supone una reducción de 15,8 millones de euros y del 1,57% en la comparativa con el año previo.
“La compañía, al inicio de la pandemia y de forma proactiva, ya impactó la valoración de sus activos por la crisis sanitaria, lo que eleva al 4% el deterioro total en las valoraciones””, afirmó, aunque resaltó la “excelente” posición de caja que mantiene.
Castellana Properties contaba con una cartera de activos formada por 18 inmuebles con una superficie bruta alquilable de 367.015 metros cuadrados, lo que se traduce en una disminución del 1,7% respecto al año precedente.
La firma señaló que, con motivo de la crisis del coronavirus, se ha enfrentado a “una serie de circunstancias sin precedentes”, por lo que indicó que se debe atribuir a la valoración un grado menor de certidumbre y un mayor grado de atención.
La socimi destacó que, a 31 de marzo, la incertidumbre material de valoración recae únicamente sobre los centros comerciales y un par de medianas, “habiéndose eliminado del resto de activos de la cartera”.
“Esto podría tener un impacto en la participación de la sociedad en empresas del grupo propietarias de centros comerciales. Con respecto al resto de activos y pasivos del balance, la Sociedad ha experimentado una disminución del valor de sus participaciones en otras empresas, siendo este producido por los impactos del Covid-19”, subrayó la compañía.
Así, destacó que el deterioro de las participaciones en sociedades del grupo, por un importe de 9,71 millones de euros, corresponde a las filiales Randolph Spain, Roxbury Spain, Junction Parque Granada y Morzal Property Iberia.