MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
La gran mayoría de los empresarios considera un “riesgo añadido” para el desarrollo de su actividad la situación política tras las últimas elecciones generales en España, según advierte Confemetal en su último boletín de coyuntura económica.
“La aritmética parlamentaria surgida tras las elecciones del pasado mes de julio ha planteado una complejísima situación en la que la conformación de mayorías y la consecuente constitución de un gobierno se están discutiendo y negociando en términos territoriales, judiciales e incluso constitucionales”, apunta la patronal del metal.
En este escenario político “lleno de incertidumbres”, Confemetal cree que la economía ofrece “perspectivas preocupantes” derivadas de la situación global y agravadas por la situación política española.
“Todo ello genera una inestabilidad y una provisionalidad que están paralizando la toma de decisiones, desincentivan la inversión y el consumo, y están frenando reformas clave para que las empresas puedan desarrollar su actividad, crear riqueza y generar empleo”, avisa la patronal metalúrgica.
Confemetal critica que el debate político no sólo está obviando la política económica sino que olvida que “algunas de las cuestiones en negociación aumentan la inestabilidad social y territorial y generan mayor incertidumbre en los mercados financieros y de bienes y servicios, no ayudando en nada a mantener la confianza para que España siga siendo atractiva para la inversión productiva”.
La organización empresarial pide “responsabilidad y generosidad” a la clase política para poner los intereses generales por delante de los personales y partidistas, e le insta a alcanzar pactos sobre los que impulsar la estabilidad.
“El debate político actual no debería olvidar que seguimos necesitando inversión en infraestructuras productivas, estímulos a la demanda de bienes industriales, e instrumentos y medidas para mejorar la financiación de las empresas y reducir la morosidad”, apunta.
Asimismo, subraya que “lo realmente importante y urgente” es apoyar la internacionalización de las empresas y trabajar por la simplificación administrativa y la unidad de mercado, al tiempo que ve “prioritario” combatir el fraude fiscal, coordinar las políticas tributarias estatales, autonómicas y locales, y reducir impuestos.
“Nada de todo esto se contempla ni se discute, como si el gobierno que pueda salir de este proceso de negociación no tuviera otro objetivo que su propia constitución, más allá del respeto a la Ley y a los procedimientos democráticos, y sin que la realidad social y económica de familias y empresas parezcan merecer un marco político y jurídico previsible y libre de incertidumbres para poder desarrollarse”, denuncia Confemetal.
