MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
El presidente del Banco Central de Brasil, Roberto Campos Neto, ha defendido que el organismo central toma siempre decisiones basadas en aspectos “técnicos” y ha asegurado que la historia le dará la razón y valorará el trabajo de la entidad como “muy bueno” durante estos últimos años marcados por una elevada inflación.
En una entrevista televisiva, el responsable del banco ha llamado a fijarse en el resultado, refiriéndose a la caída que se está dando en el índice de precios, para evaluar la posición de la entidad en los últimos meses, que ha sido duramente criticada por ser partidista o ir en contra de la economía al retrasar el recorte de los tipos de interés.
“La historia demostrará que las decisiones fueron técnicas. Gracias a nuestra ardua tarea, la situación económica será más tranquila durante los próximos años. La gente va entendiendo con el paso del tiempo que cumplimos una función técnica y, al final, se contará la verdad”, ha afirmado.
Pese a haber recibido numerosas críticas por parte del Gobierno, Campos Neto ha asegurado que la relación con el equipo económico es “muy buena” e incluso se ha mostrado abierto a reunirse con el presidente del país, Luiz Inácio ‘Lula’ da Silva.
“Las críticas son parte del proceso. Estoy preparado, también recibí críticas del anterior Gobierno y se ha olvidado rápidamente. Para mí, trabajar en el Banco Central, es una experiencia muy buena”, ha apuntado.
RITMO APROPIADO
Tal y como había adelantado el organismo tras su última reunión de política monetaria, en la que después de un año con los tipos congelados se optó por un recorte de 50 puntos básicos de la tasa, el presidente del banco ha reafirmado que este es, a juicio de la entidad, el ritmo “apropiado” para reducir la cifra.
Aunque no ha querido comprometerse con esta cifra, ha dejado entrever que esa sería la interpretación “adecuada y correcta” de los siguientes pasos que podría seguir el banco. Incluso, ha adelantado que las posibilidades de recortes más elevados son “bastante altas”.
“Hay una división en el seno del órgano de dirección sobre dejar la puerta abierta o cerrada a los 50 puntos básicos. Sin embargo, vemos algunas mejoras en las cifras de inflación de servicios o en el manejo de las expectativas que permiten apostar por la primera opción”, ha explicado.