MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
El Banco Central de Brasil ha enfatizado que la conducción de la política monetaria requiere “serenidad y paciencia” ya que el proceso de control de la inflación actúa con cierto retraso, aunque ya ve “menos probable” retomar el ciclo de subidas de los tipos de interés.
Así se desprende del acta de la última reunión de política monetaria del organismo central, celebrada a principios de mayo, y en la que se ha optado por congelar los tipos en el nivel del 13,75% por sexta ocasión consecutiva. Pese a que no se descarta la opción de volver a incrementar la cifra, la entidad cree que este escenario tiene menor probabilidad.
Esta idea no había sido mencionada hasta ahora por el banco, sino que se había mostrado tajante a la hora de explicar que no se dudaría en optar de nuevo por alzas en la tasa de política monetaria. Este cambio se da en un contexto en el que el presidente de la entidad, Roberto Campos Neto, ha lamentado que se politicen las decisiones de carácter técnico que toma el comité de política monetaria.
En los últimos meses, y pese a la caída de la inflación en Brasil, el banco central del país se ha mantenido firme en su objetivo de contener los precios con una cifra elevada de los tipos de interés. Para hacer frente a las críticas (vertidas por sindicatos, algunos empresarios e incluso directamente por el Gobierno brasileño) el organismo ha apuntado que este proceso desinflacionario requiere su tiempo, por lo que se reafirma en su decisión.
No obstante, de cara a los próximos meses, se espera una caída relevante en la inflación interanual por el efecto base del año anterior, pese a que las expectativas continúan desvinculadas de la meta establecida.