MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
La petroquímica brasileña Braskem logró un beneficio neto atribuido de 184 millones de reales brasileños (33,4 millones de euros) en el primer trimestre, lo que supone una caída del 95% respecto a las ganancias registradas en el mismo trimestre del año anterior, según se desprende de su cuenta de resultados.
No obstante, este resultado ha sido mejor que el del cuarto trimestre del año, cuando los ‘números rojos’ se elevaron hasta los 1.710 millones de reales brasileños (310,8 millones de euros).
Este incremento, según han apuntado desde la compañía, obedece a un aumento de la demanda, debido principalmente a la mejora de la actividad industrial global, el inicio del proceso de consumo de inventario en la cadena de transformación y el fin de las restricciones sanitarias en China.
Los ingresos de la compañía cayeron un 27% en comparación con el primer trimestre de 2022, hasta los 19.446 millones de reales (3.534 millones de euros). No obstante, los costes se redujeron un 15%, hasta los 18.461 millones de reales (3.355 millones de euros).
En este contexto, la cifra de negocio en el mercado de Brasil se redujo un 24%, la de Europa y Estados Unidos un 36% y la de México un 31%.
Por su parte, el resultado operativo de la compañía también fue negativo, por valor de 352 millones de reales (unos 64 millones de euros), frente a los ‘números verdes’ de 1.247 millones de reales (226,6 millones de euros) del año previo. A su vez, el resultado bruto de explotación (Ebitda) recurrente fue de 1.063 millones de reales brasileños (193,2 millones de euros), un 78% menos.
