MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha planteado al Congreso integrar en una misma autoridad las funciones de resolución de entidades, algo que pasaría por concentrar en el fondo de rescate funciones de este tipo que conservan el Banco de España y la Comisión Nacional de los Mercados y Valores (CNMV), o integrar en estos organismos las funciones que ostenta el FROB.
Así lo ha planteado su presidenta, Paula Conthe, durante su comparecencia ante la Comisión para la auditoría de la calidad democrática, la lucha contra la corrupción y las reformas institucionales y legales, la conocida como Comisión Anticorrupción, a la que ha acudido para plantear mejoras en la imparecialidad e independencia de los supervisores y reguladores.
En su exposición, Conthe ha explicado que su organismo se encarga de la ejecución de las resoluciones adoptadas por la entidad europea (JUR, Junta Única de Resolución), y de la resolución para entidades de crédito no significativas, pero que también Banco de España y CNMV cuentan con competencias de resolución preventiva.
Estas se encargan de recopilar datos y elaborar planes de resolución, fijar requerimientos mínimos de pasivos elegibles o identificar y eliminar obstáculos a la resolubilidad de entidades de crédito, en el caso del Banco de España, y de empresas de servicios de inversión, en el caso de la CNMV.
Un modelo mixto único en la Unión Bancaria, ha explicado Conthe, que, a su juicio, “permite extraer el máximo valor de las capacidades específicas de cada autoridad”, pues se apoya en el conocimiento de los supervisores y garantiza la independencia funcional y orgánica para la resolución de entidades.
Conthe considera que este modelo “opera con razonable eficacia, aunque hay margen de mejora”, y de hecho cree que esta distinción “a menudo resulta artificial, lo que puede generar confusión en la atribución de responsabilidades y operativamente puede dar lugar a duplicidades y desaprovechamiento de sinergias”.
“Si bien la división tuvo sentido en un momento coyuntural, en el medio plazo consideramos que debería contemplarse integrar las funciones preventivas y ejecutivas de resolución en una misma autoridad”, ha dicho, recordando que se trata además esta de una recomendación del propio FMI en su informe sobre el sector financiero español en 2017.
En el caso de optarse por una integración de las labores de resolución en los organismos supervisores, Conthe ha destacado cómo este proceso conllevó una revisión de procesos, regímenes internos y gobernanza con el fin de asegurar la independencia de estas labores.
Y es que, tal y como ha explicado, las funciones de supervisión y resolución están “tan estrechamente conectadas” que pueden surgir “potenciales conflictos de interés”: “El interés de la supervisora es agotar todas las opciones para intentar la continuidad de la entidad y, por su parte, la de resolución tiene incentivo a intervenir cuanto antes para que la situación esté lo menos deteriorada posible”, ha explicado.
En el caso de que fuera el FROB el que integrara estas competencias –podría incluso plantearse una agencia que englobara sus funciones y las del Fondo de Garantía de Depósitos, ha dicho– la principal desventaja sería la pérdida de conocimientos específicos derivados de la supervisión, y posibles costes y duplicidades de la necesidad de coordinarse entre ambos organismos.
En todo caso, ha señalado cómo en España la actual configuración facilita esta coordinación, al estar integrado el Banco de España y la CNMV en la propia comisión rectora del FROB y la existencia de convenios con estas instituciones.