VITORIA, 21 (EUROPA PRESS)
Bodegas Faustino y Foster+Partners se han aliado para construir un nuevo complejo arquitectónico “innovador” y “sostenible” alrededor del vino.
En concreto, el proyecto incluye la renovación de zonas y la construcción de otras nuevas e implica, además, una mejora en la productividad de las bodegas de Rioja Alavesa.
Según han explicado desde Faustino, ‘El Legado de Bodegas Faustino’, ideado por Foster+Partners, supone “un rediseño completo que beneficia a toda la bodega y la finca”, con el que busca convertirse en “un nuevo paradigma de cómo serán las bodegas del futuro”.
Este proyecto comprende la construcción de nuevas zonas para visitantes y nuevos edificios, así como una serie de intervenciones de renovación de instalaciones y edificios existentes, que ya han permitido aplicar desarrollos “vanguardistas e innovadores” en tecnología y sostenibilidad en la elaboración y crianza de Faustino, bodega ubicada en la localidad alavesa de Oyón.
Como resultado de estos trabajos, las nuevas instalaciones de Bodegas Faustino permitirán que los visitantes puedan disfrutar de un conjunto de experiencias alrededor del vino, el viñedo, la naturaleza, la arquitectura, la cultura y la sostenibilidad en una propuesta “de conexión de todos los espacios con los viñedos, que pasan a ser parte del complejo arquitectónico”.
Esta intervención, han destacado, se produce en “una bodega histórica, que cuenta con más de 160 años, más de 60.000 barricas en las que envejecen los vinos de Rioja de mayor calidad y más de nueve millones de botellas de Reserva y Gran Reserva de Rioja”.
La primera fase de ‘El Legado de Bodegas Faustino, Proyecto Faustino – Foster+Partners 2024’, que ya puede ser visitada, supone la reconversión del entorno y la intervención en los espacios interiores y exteriores de la bodega ocupados para la elaboración y crianza de vino.
En paralelo, han destacado sus responsables, permite mejorar la productividad de Bodegas Faustino, con una mejor “gestión de tiempos y calidad en todos los procesos que esta renovación facilita”.
Entre las mejoras en esta primera fase, se encuentran la cobertura con vegetación de las fachadas, que ayuda a mantener la temperatura de forma más eficiente, o la creación de una nueva nave bodega de elaboración, que cuenta con herramientas como el uso de tolvas inclinadas, sistema boreal (refrigeración de toda la pasta de uva para mejoras de fermentación y por tanto de calidad), trabajo con gases inertes o uso de técnicas innovadoras en los procesos fermentativos.
La renovación del color del pavimento exterior y de las fachadas con un tono que no absorbe calor, la instalación de placas solares, o el cambio del “esquema de flujo de los visitantes y la actividad empresarial diaria a través de actuaciones que suponen un cambio estético y un cambio arquitectónico, para hacer compatible la actividad productiva con la presencia de visitantes” son otras de las actuaciones.
La consejera delegada de Familia Martínez Zabala, Lourdes Martínez Zabala, ha destacado que el proyecto “proyecta a Bodegas Faustino hacia el futuro, al tiempo que permite ser un destino turístico, que ayude a dinamizar la zona de Oyón, nuestras raíces, y la Denominación de Origen Rioja”.
De esta forma, ésta será la segunda colaboración entre este grupo bodeguero, pionero en el desarrollo arquitectónico en el mundo de las bodegas, y el reconocido arquitecto británico. “Hace más de 30 años construimos Bodegas Campillo, y hace 12 años creamos Bodegas Portia, la primera bodega construida por Foster+Partners. Ahora es lógico dar un paso adelante y consolidar ‘El Legado de Bodegas Faustino’ como una nueva dimensión del enoturismo que albergue un conjunto de experiencias mucho más completo y vanguardista que nos permite aumentar el grado de conocimiento sobre los viñedos y el vino de nuestros visitantes”, ha señalado la presidenta de Familia Martínez Zabala, Carmen Martínez Zabala.