MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
Repsol, Cepsa y Naturgy son las energéticas que más contribuirán a las arcas públicas este año por el impuesto extraordinario establecido por el Gobierno para gravar con un 1,2% las ventas de las empresas del sector cuyos ingresos superen los 1.000 millones anuales.
En total, Repsol, Cepsa, Naturgy, Iberdrola y Endesa tendrán que abonar este año unos 1.483 millones de euros por el tributo, recurrido ante la Justicia por “discriminatorio, injustificado y arbitrario”. De esta cantidad, las tres primeras empresas aportarán el 72,5%.
En concreto, Repsol tendrá que abonar este año en torno a 450 millones de euros por dicho gravamen, según precisó el consejero delegado de la compañía, Josu Jon Imaz, en la conferencia con analistas para explicar los resultados de 2022, en la que aseguró, no obstante, que dicho impuesto no tendrá un impacto “material” en las cuentas de 2023.
El directivo criticó este impuesto, al considerar que no es compatible ni con la Constitución Española ni con la normativa europea, por lo que la compañía lo ha llevado ante la Audiencia Nacional, que, a su vez, ha rechazado la suspensión cautelar de la orden del Ministerio de Hacienda que desarrolla los modelos para la declaración y pago anticipado de los impuestos temporales para las empresas energéticas y los bancos, solicitada por la propia Repsol.
“Estamos encantados de contribuir a la sociedad a través de los impuestos que pagamos, pero esta tasa es discriminatoria y desincentivará el negocio. Lo que necesitamos las empresas es más inversión y producción para mantener los precios energéticos bajos”, defendió Imaz.
CEPSA PAGARÁ 325 MILLONES
Durante este año, Cepsa pagará el impuesto extraordinario que grava a las empresas energéticas en función de sus ingresos de 2022, que en su caso ascenderá aproximadamente a 325 millones de euros. Este cargo, precisa el grupo, no está reflejado en los resultados de 2022.
La contribución fiscal total de Cepsa alcanzó los 6.654 millones de euros en 2022, cifra récord en la historia de la compañía, de los que el 71% (un total de 4.721 millones de euros) fueron impuestos pagados en España.
Por su parte, Naturgy pagará este año en torno a 300 millones de euros, según el presidente ejecutivo de la firma, Francisco Reynés, quien destacó que esa cifra ya está integrada en las previsiones de la compañía sobre el resultado bruto de explotación (Ebitda) para 2023, que la energética espera que sea “por lo menos igual” al de 2022, cuando ascendió a 4.954 millones de euros (+40,4% en términos interanuales).
Iberdrola, por su parte, calcula que este año pagará en torno a 200 millones de euros debido a este impuesto, que también ha recurrido ante los tribunales.
“Consideramos que este impuesto incumple la Constitución Europea y el Derecho europeo y no esperamos que este año haya una decisión de los tribunales, probablemente el año que viene”, indicaron desde la compañía.
De su lado, Endesa también está inmersa en la batalla judicial contra el impuesto y lo ha recurrido también ante la Audiencia Nacional por considerarlo “injustificado y discriminatorio”. La compañía avanzó que los resultados de los años 2023 y 2024 se verán impactados tanto en Ebitda como en resultado ordinario neto por la nueva tasa, con una afectación de 208 millones por año.
La medida adoptada por las energéticas ante la Justicia se suma al recurso presentado por la patronal eléctrica española Aelec hace unos días.
817,4 MILLONES CON EL PAGO ANTICIPADO
Al margen de la batalla judicial, la Agencia Tributaria ya ha recaudado 817,4 millones con el pago anticipado del impuesto temporal a energéticas, mientras que el importe obtenido por el tributo a entidades financieras superó los 637 millones de euros, que en conjunto suman 1.454 millones de euros para las arcas públicas.
“Los resultados son muy positivos”, destacó la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero.
El pasado 20 de febrero finalizó el plazo tope para el pago anticipado de los impuestos, que se corresponde con la mitad de lo previsto para todo el año. Así, las entidades financieras y energéticas han tenido que ingresar, en concepto de pago anticipado de dicha prestación, el resultado de multiplicar el porcentaje del 50% sobre el importe de presentación calculado.
A la luz de estos primeros datos, la titular de Hacienda prevé que se superarán los 3.000 millones anuales –en 2023 y 2024– inicialmente estimados sobre la recaudación de estos tributos temporales. Estos ingresos ‘extra’ buscarán cubrir los costes derivados de las medidas para hacer frente a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania.