Calcula que un pago de 860 euros a las rentas más bajas costaría la mitad de la rebaja del IVA a luz y alimentos y la ayuda a carburantes
MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
El Banco de España calcula que el Gobierno va a destinar entre 34.000 y 40.000 millones de euros en medidas para hacer frente a las crisis energética y de inflación derivada de la guerra de Ucrania entre 2021 y 2025 y, de este total, tan solo entre el 15% y el 20% han sido dirigidas a las rentas más vulnerables, con lo que entre el 80% y el 85% son de carácter generalizado. El mayor impacto estaría concentrado en 2022 (suponiendo un 1,3%-1,4% del PIB) y en 2023 (suponiendo un 0,8%-1% del PIB).
Así lo pone de manifiesto en su último artículo analítico titulado ‘Medidas de apoyo frente a la crisis energética y al repunte de la inflación: un análisis del coste y de los efectos distribucionales de algunas de las actuaciones desplegadas según su grado de focalización’, en el que defiende que medidas alternativas, focalizadas en los hogares vulnerables en función de su renta, lograrían niveles de protección similares pero con un menor coste presupuestario y evitando “distorsiones” en los precios.
Concretamente, calcula que una transferencia a los hogares vulnerables (aquellos cuya renta es inferior al 60% de la renta mediana) de hasta 860 euros tendría un coste de unos 4.790 millones, prácticamente la mitad que los 9.581 millones de euros que costará la rebaja del IVA de la electricidad y los alimentos y la bonificación de los carburantes.
Tan solo menos de un 4% de los hogares vulnerables se verían perjudicados por esta medida en comparación con lo que obtendrán con la rebaja del IVA y la bonificación a los carburantes, por lo que el Banco de España concluye que se lograría mantener la protección de la casi totalidad de los hogares vulnerables con la mitad del coste presupuestario.
UNA AYUDA DE 375 EUROS PERJUDICARÍA A UN TERCIO DE LOS VULNERABLES
Junto con esta propuesta, el organismo dirigido por Pablo Hernández de Cos realiza otra simulación, en este caso, mediante una ayuda de 375 euros a cada hogar vulnerable, siendo esta cantidad igual al beneficio medio recibido por las rentas más bajas como resultado de las tres medidas generalizadas que se eliminarían (rebaja del IVA de la luz, de los alimentos y la bonificación de los carburantes).
El coste presupuestario total de estas transferencias sería de 2.095 millones de euros y supondría un ahorro presupuestario de 7.484 millones de euros respecto al coste presupuestario total de las tres medidas anteriores.
Sin embargo, en este ejercicio hipotético, no todos los hogares vulnerables se verían afectados de la misma forma, dado que no todos se benefician igual de las tres medidas eliminadas. Así, en torno a un 37% de estos hogares experimentarían una pérdida media de 229 euros, mientras que los restantes hogares vulnerables experimentarían una ganancia media de 154 euros.
LOS HOGARES CON MENOR RENTA SOPORTAN MÁS INFLACIÓN
El Banco de España realiza estas dos simulaciones tras constatar que las rebajas del IVA de los alimentos, así como de la electricidad y del gas, suponen un mayor ahorro como porcentaje de su gasto total para los hogares de renta baja, aunque no así en términos absolutos, que beneficia más a las rentas más altas. En cuanto a la bonificación a los carburantes habría beneficiado en mayor medida a los hogares de renta alta, tanto en términos relativos como absolutos.
Y esto es así, entre otras cosas, porque la inflación experimentada por el 30% de los hogares de menor renta habría sido de aproximadamente el 11,3%, frente a un 9,7% en el caso del 30% de los hogares de mayor renta, ya que los hogares de menor renta dedican una mayor proporción de su gasto total al consumo de electricidad y también de alimentos básicos.
Por el contrario, el gas natural es consumido de manera más proporcional a la renta de cada hogar, mientras que la proporción de gasto en carburantes, a diferencia de los bienes anteriores, es mayor en los hogares de renta más alta.
MÁS AHORRO PARA LAS RENTAS MÁS ALTAS POR LA REBAJA DEL IVA
En vista de estos datos, el impacto presupuestario total sobre el conjunto de los hogares de la rebaja del IVA de la electricidad y el gas se estima en 5.871 millones de euros, de los cuales el 30% de los hogares con mayor renta se habrían beneficiado de un ahorro fiscal de 2.055 millones de euros, frente a los 1.484 millones de los de menor renta, un 39% de diferencia que se debe a que los hogares de mayor renta realizan un mayor gasto en estos bienes en términos absolutos.
No obstante, el Banco de España precisa que el beneficio relativo de los hogares de renta baja, definido como el ahorro fiscal respecto a su gasto total, habría sido mayor en los hogares de renta baja.
En cuanto a la rebaja del IVA de los alimentos, el estudio calcula un impacto presupuestario estimado en 645 millones, que también tiene mayor impacto en los hogares de mayor renta (240 millones), frente a los hogares con ingresos inferiores (142 millones). Esta diferencia, de un 70%, es más pronunciada que en el caso de la rebaja del IVA del gas y de la electricidad.
LA AYUDA A CARBURANTES BENEFICIA MUCHO MÁS A LOS RICOS
Por último, el coste presupuestario de la bonificación al precio de los carburantes ascendería a 3.065 millones, en este caso especialmente concentrado en los hogares de renta alta, acumulando una bonificación de 1.377 millones de euros, frente a 472 millones de las rentas más bajas, un 192% más.
A diferencia de las dos medidas anteriores, el Banco de España destaca que el impacto relativo también fue mayor en los hogares de mayor renta, coherente con los patrones de consumo comentados anteriormente, en los que los hogares de menor renta dedican una menor proporción de su gasto total al consumo de carburantes.