La discográfica Warner Music Group se anotó un beneficio neto en su segundo trimestre fiscal, finalizado en marzo, de 117 millones de dólares (97 millones de euros), por lo que la empresa volvió a registrar ‘números negros’ tras las pérdidas de 74 millones de dólares (61,6 millones de euros) del mismo periodo del año pasado, según se desprende de las cuentas que ha presentado este martes la firma.
“En el segundo trimestre, la fortaleza continua de nuestro negocio central de ‘streaming’ fue potenciada por el crecimiento impresionante de los ingresos de plataformas de ‘streaming’ emergentes, que generaron márgenes sanos y flujo de caja”, ha indicado el vicepresidente ejecutivo y director financiero de la empresa, Eric Levin.
Los ingresos entre enero y marzo fueron de 1.250 millones de dólares (1.040,4 millones de euros), lo que equivale a un incremento del 17%. De esa cifra, los ingresos procedentes de Estados Unidos fueron de 565 millones de dólares (470,3 millones de euros), un 21% más, al tiempo que la facturación internacional alcanzó los 686 millones (571 millones de euros), un 13,2% más.
El coste de los ingresos avanzó un 16%, hasta 623 millones de dólares (518,6 millones de euros), mientras que los gastos de venta, generales y administrativos fueron de 418 millones de dólares (347,9 millones de euros), un 22% menos.
En el conjunto de los seis primeros meses de su ejercicio fiscal, Warner Music cuadriplicó sus beneficios netos, hasta 215 millones de dólares (179 millones de euros), tras un alza del 11% de la facturación, hasta 2.585 millones de dólares (2.151,6 millones de euros).