MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
La directora de Innovación Abierta del Grupo Telefónica, Irene Gómez, ha subrayado que la compañía está intensificando su apuesta como ‘Corporate Venture Capital’ y recientes iniciativas como Vivo Ventures, Íope Ventures y la inversión en el fondo Leadwind son un ejemplo de cómo el grupo genera “capilaridad estratégica” en la forma en la que se lleva la innovación abierta.
En una entrevista con Europa Press, Gómez explica que, por un lado, Leadwind es un fondo que les permite extender sus inversiones en la búsqueda de ‘scale-ups’ en el ámbito del ‘deep-tech’, con una tesis muy centrada en plataformas habilitadoras, en el sur de Europa y de Latinoamérica, pero especialmente con foco en España y en Brasil. “Es decir, ha sido una pieza para extender nuestra estrategia de inversión”, mantiene.
En el caso de Vivo Ventures indica que se trataba de una “oportunidad muy grande en Brasil” para apostar por el ‘B2C’ y acompañar las decisiones estratégicas de Vivo, por lo que se decidió destinar 60 millones de euros para invertir en startups de los ámbitos de salud, educación, servicios financieros smarthome y entretenimiento entre otros, dando lugar a Vivo Ventures. En el caso de Íope Ventures, señala que este es “más sectorial”, acompaña al equipo de Telefónica Seguros, invirtiendo en insurtech y Fintech para buscar oportunidades de colaboración entre estas ‘start-ups’ y el grupo.
“Es decir, estamos invirtiendo de forma direccional y mirando mucho el negocio, con una gestión desde Wayra. Pero no nos vamos a quedar ahí y estamos trabajando en una propuesta más ambiciosa para el grupo en los próximos años”, plantea Gómez.
EL PAPEL DE WAYRA EN ESTOS DIEZ AÑOS
Así, sostiene que en estos más de diez años en los que se puso en marcha Wayra se han invertido más de 200 millones de euros y se ha conseguido algo que no muchas corporaciones pueden decir: tener más de 180 ‘start-ups’ trabajando y generando negocio con el grupo.
“Hemos sido pioneros en la forma en la que hemos ido aprendiendo a que esas conexiones funcionen. Nos ha dado visión, nos ha permitido resolver retos, ser más ágiles, y lo que demuestra es que después de estos años la compañía sigue teniendo claro que es una apuesta clara. No solo lo vemos nosotros, (…) y muchas otras empresas como Desigual o AstraZeneca cuentan con nosotros para ayudarles en este proceso a través de nuestro propio aprendizaje. Así que el aporte de valor es claro y una apuesta como esta no seguiría tan viva si no tuviera un retorno”, relata.
Los nuevos retos que se plantean a partir de ahora, según asegura la directora de Innovación Abierta del grupo, es seguir potenciando el negocio, hacer que sean más de 180 ‘start-ups’, “seguir escogiendo a las mejores” y, además, seleccionando aquellas que puedan abrir espacios de oportunidad para el futuro de Telefónica en ámbitos que igual ahora no son tan evidentes, y hacerlo de forma “escalable y sostenible”.
QUÉ TIPO DE PARTNERS BUSCA TELEFÓNICA
Subraya que en estos últimos años son más de 200 socios, de diferentes naturalezas y sectores, con los que se ha trabajado desde su área; un aprendizaje que les ha permitido dar un paso más y trasladar y ayudar a otros a que puedan incorporar programas con Wayra para el grupo Telefónica.
“Pero cuando queremos hacerlo somos claros: con socios que se tomen la innovación abierta como una oportunidad seria, que realmente quieran comprometerse con el ecosistema. Esto no es un teatro de la innovación, sino que queremos trabajar con terceros que tengan compromiso porque al final queremos que enriquezcan el ecosistema, vuelen solos, den continuidad en sus ámbitos, hagan mejor el ecosistema y hagan al final que el país crezca”, valora Irene Gómez.
De las más de mil ‘start-ups’ en las que ha invertido Telefónica, 500 forman parte de su portfolio y 180 trabajan con la compañía. Sobre las características que debe tener una ‘start-up’ para formar parte de este último grupo, apunta como esenciales el que ésta haya validado su ‘product market fit’ y que esté facturando y tengan ya una cartera de clientes.
Por otro lado, ve imprescindible que la combinación del trabajo entre ambos sea más potente que el trabajo aislado, al mismo tiempo que considera que la ‘start-up’ tiene que saber trabajar con los ritmos de la corporación.
¿MÁS INVERSIÓN EN INNOVACIÓN PARA 2023?
Preguntada sobre si para 2023 se espera una mayor inversión en el área de innovación, después de que ésta se haya incrementado en el presente curso, Gómez señala que se va a seguir manteniendo un volumen de inversión similar. Destaca que esperan intensificar el acompañamiento “de los mejores” a través de follow-ons. “Adicionalmente, estamos en un momento donde hay que cuidar el portfolio. (…) Que suceda el negocio entre las ‘start-ups’ de Wayra y Telefónica. Así que es continuista pero hay que seguir apostando de forma más clara por las mejores del portfolio”, reitera.
A su juicio, lo que aporta la innovación abierta a las grandes empresas es la velocidad y la aceleración, pero, adicionalmente, dice que añaden una conexión con una visión externa al mercado, con los retos, y con cómo resolverlos.
“Es entender las nuevas oportunidades del mercado desde los ojos de otros, y esta es sin duda un parte potente de las estrategias de innovación abiertas. Adicionalmente, el juego en equipo. Esto significa que muchas veces este trabajo con ‘start-ups amplifica el talento de las corporaciones a través del trabajo conjunto y, por último, uno muy táctico, el hecho de saber colaborar te da esas eficiencias”, defiende la directora de Open Innovation del Grupo Telefónica.
En cuanto a cómo percibe el ecosistema emprendedor, Irene Gómez sostiene que éste se está viendo más afectado en las grandes rondas de financiación, en las ‘start-ups’ que ya están en fases más maduras, aparte de que en general se está aplicando en el ámbito inversor un principio de prudencia. “Lo que no quiere decir que no haya capital, sino que se está siendo más prudente en el desembolso del mismo”, aprecia.
En concreto, valora que el ecosistema español tiene una característica que le hace particular, el que sus ‘start-ups’ han sido más conservadoras al usar sus fondos, es decir, han tenido unos ‘unit economics’ más sanos, y ahora, en épocas más complejas como la que estamos viviendo, considera que tenemos un ecosistema más resiliente que otros.
Muestra de ello, por ejemplo, indica que en España se cuenta con doce unicornios a los que se ha llegado este año como Cabify o Glovo. “Es normal que no todas puedan llegar a ese punto pero lo positivo es que cada vez son más y más en nuestra lista de unicornios, y esto habla de la madurez del ecosistema que tenemos”, resalta.
En último lugar, y sobre la importancia de invertir en tecnologías relacionadas con el metaverso, Gómez reconoce que hoy en día no hay ninguna apuesta segura y el tema es cuánto riesgo quieres asumir.
“En el caso de Open Innovation, y en Wayra en particular, hemos aprendido a jugar a diferentes velocidades y asumiendo riesgos como inversor, porque de todas las inversiones muchas se caen pero otras crecen y nos abren oportunidades de negocio”, ha indicado.
Asimismo, ha destacado que la compañía juega a dos velocidades: la innovación más a corto, más táctica, donde busca respuestas a las necesidades de hoy; y por otro lado, aspectos como el metaverso, en ‘Web3’, y en, al menos, en todo lo que está dibujando un posible futuro, “que ahora es incierto, porque nos va a dar la ventaja de entender cómo se van a resolver los retos del futuro y ser parte de él”.