El precio medio de la vivienda en España se sitúa un 21,2% por debajo de los máximos de 2007
MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
El precio medio de la vivienda nueva y usada registró un descenso del 0,8% en agosto en comparación con julio, aunque es un 8,5% superior al de hace un año (agosto de 2021) y se mantiene un 21,2% por debajo de los máximos de finales de 2007, según refleja la estadística Tinsa IMIE General y Grandes Mercados publicada este martes.
“El mercado residencial repite el patrón de años anteriores y muestra en agosto un freno en la tendencia de crecimiento de los precios experimentada en meses anteriores”, explica Tinsa en su informe.
Según se detalla en el estudio, esta variación mensual negativa en agosto, liderada por las capitales y grandes ciudades y las islas es recurrente en la serie de precios y tiene, por tanto, un componente estacional asociado al descenso de la actividad en el periodo vacacional.
De su lado, los grupos de ‘áreas metropolitanas’, ‘costa mediterránea’ y ‘resto de zonas’ se han mantenido estables, con variaciones próximas al 0%”, ha señalado la directora del Servicio de Estudios de Tinsa, Cristina Arias.
En concreto, las ‘capitales y grandes ciudades’ destacan entre los grupos analizados con la mayor caída de precios dentro un escenario de corrección moderada, con un descenso del 0,9% entre julio y agosto, seguidas de los territorios insulares (-0,5% mensual), donde la evolución de precios llevaba varios meses moderándose.
Por su parte, las ‘áreas metropolitanas’ y la ‘costa mediterránea’ se mantuvieron en agosto prácticamente sin cambios, con variaciones del 0% y -0,1%, respectivamente. Tan solo las localidades más pequeñas del interior peninsular y de la costa atlántica, agrupadas en ‘resto de municipios’, aumentaron ligeramente su valor medio en agosto en tasa mensual un 0,1%.
Arias ha destacado, no obstante, que en términos interanuales, “todas las zonas reflejan incrementos significativos con respecto a agosto del año pasado, pues la aceleración generalizada de los precios residenciales no se inició el año pasado hasta el último trimestre de 2021”.
ELEMENTOS DESACELERADORES DE LA DEMANDA DE PRODUCTO RESIDENCIAL
La directora del Servicio de Estudios de Tinsa ha apuntado que, tras una primera mitad del año en el que la demanda residencial ha mantenido una tendencia alcista, con incrementos interanuales en el volumen acumulado de compraventas e hipotecas, de cara a la segunda mitad del año “la reducción del poder adquisitivo de los hogares derivada de una inflación creciente por encima del crecimiento de los salarios, la caída del índice de confianza del consumidor ante las perspectivas de menor crecimiento económico y el incremento de los tipos de interés que encarece las hipotecas pueden actuar como elementos desaceleradores del crecimiento de la demanda de producto residencial”.
En contraposición, ha señalado que el incremento del precio de los alquileres derivado del trasvase de la demanda de compraventa a alquiler puede incentivar la demanda de inversión, especialmente en grandes ciudades y áreas metropolitanas, asociadas a polos de actividad económica, así como en otros municipios que puedan ganar tracción con las nuevas dinámicas de teletrabajo.