MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
La Fundación Innovación España (Fundación I+E), entidad formada por multinacionales con larga presencia en España, ha formulado una serie de propuestas encaminadas a fortalecer el sector industrial, a fin de que sustente un modelo económico más resiliente y sostenible.
Dichas propuestas son parte de la segunda entrega del proyecto ‘ImasE. Ideas para una España más Sostenible’, que pretende ser un punto de observación y canalización de ideas para construir una España “más avanzada y sostenible” a través de la innovación, la industria, la formación y la tecnología.
En concreto, esta segunda entrega ofrece diferentes indicadores ilustrativos sobre la industria en España, que se compara con otros países europeos, así como los testimonios y puntos de vista de la ministra del ramo, Reyes Maroto, o el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, entre otros. Además, recoge información sobre algunos proyectos industriales innovadores puestos en marcha en España.
Entre las propuestas, cabe destacar el diseño de un plan industrial “coherente”, en el marco de un Pacto de Estado por la Industria, con una agenda nacional que coordine las estrategias de innovación y las fortalezas de cada una de las comunidades autónomas, con el fin de establecer sinergias regionales.
Asimismo, se apuesta por potenciar la industrialización de la I+D, a través de marcos regulatorios e instrumentos de colaboración público-privada que permitan elevar a escala industrial la implantación de proyectos de alta madurez tecnológica. En la misma línea, se plantea dar un mayor impulso a las ‘startups’ industriales y facilitarles el salto de la fase de investigación a la de industrialización y llegada al mercado.
En lo que se refiere a la financiación, la Fundación considera imprescindible “mejorar el acceso de las empresas a las inversiones”, con especial interés en atraer a los inversores extranjeros al sector industrial de España.
Según han explicado desde la Fundación I+E, estas propuestas tienen como fin “fortalecer la industria española” e “incrementar su peso en el sistema productivo”, con el objetivo de que represente el 20% del PIB, lo que permitiría a España contar con una economía “competitiva, avanzada y resiliente” ante coyunturas de cualquier índole.