Si fija como objetivo alcanzar las 20.000 viviendas en venta y 10.000 en alquiler
MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
Grupo Lar cerró el ejercicio 2021 con 180 millones de ingresos consolidados, lo que supone un incremento del 117% respecto al año precedente, y batiendo incluso los 124 millones de euros registrados en 2019, antes de la pandemia.
En concreto, la empresa española especializada en la inversión, desarrollo y gestión de activos inmobiliarios aumentó un 22% su cifra de negocio en España, siendo México y Polonia los países que registraron las mayores alzas, según ha informado en un comunicado.
La estrategia de Grupo Lar está basada en la diversificación de riesgo, el desarrollo de ventajas competitivas mediante alianzas estratégicas y la innovación tecnológica, gestionando 14.462 viviendas en promoción para venta o alquiler a cierre de 2021.
Su cartera total es de 3.669 millones de euros, de los que 1.532 millones de euros pertenecen al segmento terciario (logística y retail) y 2.137 millones de euros al residencial, con unas superficies de 646.366 metros cuadrados y 803.905 metros cuadrados, respectivamente.
España concentró en 2021 el 55,38% de la cartera gestionada, mientras que su negocio internacional copó el restante 44,62%. La compañía cuenta con una plantilla de más de 250 empleados en los seis países donde opera: España, Polonia, Brasil, México, Perú y Colombia.
“En 2021, hemos implantado numerosas iniciativas enfocadas a potenciar las sinergias, fomentar la innovación con el lanzamiento de LarTech y a incrementar la flexibilidad. Hemos profundizado en la definición de la visión de futuro del grupo y hemos lanzado Vivia como nuestra gestora de vivienda en alquiler”, ha explicado el presidente de Grupo Lar, Miguel Pereda.
Para los próximos años, el objetivo de la compañía es alcanzar una cartera 20.000 unidades de viviendas para la venta y 10.000 en alquiler, incrementar su actividad como promotor logístico, mantener su posición en la gestión de centros comerciales y consolidar su entrada en algunos de los segmentos alternativos, todo ello combinado con un incremento de los fondos bajo gestión.
Para ello, ha establecido tres líneas estratégicas: intensificar la separación entre los negocios de inversión y de gestión de activos; incrementar la diversificación como prestadores de servicios inmobiliarios, potenciando el tamaño del porfolio y ‘equity’ gestionado; e impulsar la transversalidad de las áreas de innovación, ESG, análisis de entorno y la gestión de capital de terceros.