Los préstamos en vigilancia especial repuntaron un 23% en 2021
MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
Axesor ha advertido del previsible repunte de los impagos en los préstamos avalados por el Instituto de Crédito Oficial (ICO) a partir del segundo trimestre de 2022, que podría desembocar en un incremento de la morosidad y un elevado número de “empresas zombi”.
En su boletín trimestral de morosidad, que recopila los principales indicadores bancarios y de evolución del tejido empresarial a cierre de 2021, la compañía del grupo Experian resalta que el número de créditos en situación de vigilancia especial repuntó un 23% interanual, superando los 150.000 millones de euros.
Por otro lado, el informe revela que el 40% de los beneficiarios de los préstamos ICO reestructuraron su deuda, ampliando el periodo de carencia hasta el próximo mes de mayo. “Todo ello podría desembocar en un incremento de la morosidad a partir del segundo trimestre del ejercicio”, ha advertido Axesor.
El boletín trimestral apunta que el impacto de la variable ómicron, el incremento de los precios, los máximos en los precios de la energía y de los carburantes y el devenir del conflicto entre Rusia y Ucrania podrían resultar “letales” para la solvencia de las empresas y, por tanto, para el tejido empresarial español.
El previsible incremento de los impagos, unido a las incertidumbres a las que se enfrenta la economía española, podrían además hacer aflorar “un importante número de empresas zombi”, sostiene el informe.
La presidenta y consejera delegada de Experian España y Portugal, Rita Estévez, ha explicado que, al repunte de la inflación y a la ralentización del crecimiento económico, se unen la incertidumbre sobre los ERTE y el hecho de que el Banco de España haya reconocido una morosidad latente de 10.000 millones de euros.
“El Gobierno debe tomar medidas adicionales que contribuyan a la sostenibilidad del tejido empresarial y, a su vez, eviten que las empresas zombi se mantengan en la economía”, ha señalado Estévez.
En cuanto al crédito hipotecario, el informe apunta a una reducción del nivel de endeudamiento hipotecario tanto en los hogares como en las sociedades inmobiliarias y constructoras, que viene acompañado de una “llamativa” rebaja en el saldo de préstamos morosos, especialmente en el caso de los particulares.
“Se aprecia que tanto familias como sociedades inmobiliarias siguen pautas de comportamiento semejante, con caídas del saldo en los préstamos y un significativo descenso de la morosidad. Esto implica que, en estos momentos, las cifras de préstamos hipotecarios concedidos en la actualidad estén muy lejos de los existentes durante el periodo 2008 a 2010, momento de la denominada burbuja inmobiliaria”, apunta Axesor.