MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
Aena invertirá un total de 350 millones de euros en placas fotovoltaicas en aeropuertos hasta 2026, lo que les permitirá autoabastecerse de energía, según ha señalado el presidente y consejero delegado de Aena, Maurici Lucena.
“Ello nos permitirá en 2026 autoabastecernos completamente de la energía que consumimos”, ha señalado Lucena durante el encuentro ‘Desarrollo Sostenible y Oportunidades de los Territorios’ organizado por ‘Generación de Oportunidades’, un proyecto de Europa Press en colaboración con McKinsey.
En concreto, el operador destinará esta inversión en placass fotovoltaicas a 14 de sus 46 aeropuertos, lo que supone una superficie de más de 700 hectáreas.
Durante su intervención, Lucena ha resaltado que Aena es, dentro de las empresas de servicios, dejando a un lado Adif o Renfe, una de las compañías que más energía consume en España y “eso es una muestra de la velocidad a la que se hará la transición” en el sector aeroportuario.
“Aena será en 2026 neutra en emisiones y en 2040 va a ser emisiones cero, incluso antes”, ha señalado Lucena, quien ha destacado que la sostenibilidad y la transición ecológica tendrán un coste y hay que lograr que se inserte dentro de ese círculo de crecimiento, inclusión y sostenibilidad.
“Necesitamos crecimiento económico para ser más inclusivos y además desde la perspectiva de la sostenibilidad, porque para llegar a 2050 con emisiones cero hay que asumir que esto no ha ocurrido nunca en la historia de la humanidad. Para ello necesitaremos unos volumenes monumentales de inversiones y para ello tendremos que crecer”, ha señalado.
Además, según ha indicado, existe otro elemento “imprescindible” para la transición ecológica, que es la necesidad de “desencadenar” muchas innovaciones “radicales” que representen “puntos de ruptura tecnológicos” en los dintintos ámbitos de la tecnología y “eso solo se consigue con crecimiento económico”.
Lucena ha resaltado que “casi siempre” la vanguardia de estos cambios ha sido Europa. “Somos muy afortunados de estar en Europa, porque va a ser el área del mundo más exigente desde el punto de vista medioambiental”, por lo que, según ha señalado, es “una suerte” y para las empresas un reto.
En concreto, ha explicado que el sector del transporte aéreo es de los que tienen la descarbonización más difícil, porque los ciclos de inversión son “larguísimos” y las exigencias en materia de seguridad son “realmente inpresionantes”, frente a los aeropuertos que lo tienen más fácil.