MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
Las principales divisas tendrán su equivalente digital en cinco años, según el informe ‘Criptodivisas’ elaborado por profesores de la EAE Business School, aunque su implantación tendría también desventajas que se tendrán que tener en cuenta para su puesta en marcha.
El estudio señala como principal inconveniente para estos proyectos el consumo energético “desorbitado”, tanto por su coste como por las implicaciones medioambientales: de convertirse en monedas de uso común, su minado requeriría mucha más energía que la que ahora se tiene la capacidad de producir.
Por otra parte, el informe sostiene que el actual número de criptomonedas es “insostenible”. El profesor Javier Rivas, uno de los autores, ha explicado que la desregulación ha elevado la capitalización de este mercado hasta los dos billones de dólares (en torno a 1,8 billones de euros), lo que supone en sí mismo “un peligro para los mercados financieros internacionales”.
“Estamos ante un nuevo tipo de dinero que incrementará la seguridad, a medio plazo, de la fortaleza del sistema y reducirá el número de intermediarios”, ha señalado uno de los autores, Javier Rivas.
El bitcoin es la moneda más importante por capitalización y precio, aunque el aumento de este último y la volatilidad que ha ido registrando en los últimos meses podrían indicar que el activo ha alcanzado su techo.
Ether es la segunda por nivel de capitalización y también ha experimentado una fuerte subida de precio y volatilidad este año, duplicando su valor, al igual que otras criptomonedas como cardano, cosmos, dogecoin o tezos.
NECESIDAD DE REGULACIÓN
Los tres autores del informe estudio instan a la “urgencia en la regulación del sector”.
“Aunque de momento el peso de las operaciones ilícitas no es tan grande, el potencial de estos activos para financiar actividades ilegales, terrorismo o lavado de activos es enorme. Debe haber una regulación que lo impida y debe ser internacional, puesto que es un problema global”, han destacado.